El pasado 21 de marzo, con motivo del Día Mundial del Agua de las Naciones Unidas, la Comisión Europea publicó una declaración conjunta del Vice-Presidente Katainen, el Comisario Hogan y el Comisario Vella, con objeto de promover la reutilización innovadora del agua, en razón de sus beneficios por el empleo, la agricultura y el medio ambiente. A continuación se presentan los apartados más relevantes de la declaración.

“Estamos convencidos de la necesidad de avanzar hacia una economía más circular así como de gestionar nuestros recursos, incluyendo entre ellos el agua, de una forma más sostenible y eficiente. Necesitamos mayores inversiones para hacerlo efectivo, dedicándolas especialmente a atender soluciones nuevas e innovadoras. La creación de sistemas hídricos innovadores ofrece un potencial significativo para impulsar la competitividad y el crecimiento del sector del agua europeo, que emplea en estos momentos a un millón de personas en Europa. Mediante la reducción de las cantidades insostenibles de alimentos malgastados es posible reducir significativamente la cantidad de agua residual, considerando la dependencia existente entre la producción de alimentos y el consumo de agua. Tenemos igualmente un potencial de crecimiento en otros sectores relacionados con el agua (infraestructuras que utilizan agua, desarrollo de tecnologías del agua, infraestructura de agua urbana y otras) en las que la innovación puede mejorar la eficiencia tecnológica y abrir nuevos mercados. Unas exigentes normas europeas para la calidad del agua de consumo humano, de las aguas de baño y del tratamiento de aguas residuales han permitido el desarrollo de una potente industria hídrica europea: los dos líderes globales tienen un origen europeo y cuentan con una cifra de negocios conjunta de 20.000 millones de euros.

La agricultura depende del agua para la producción de alimentos y de empleo rural. No obstante, los nutrientes y los pesticidas generados por la agricultura contribuyen también a rebajar los niveles de calidad del agua, y la extracción de agua para riego en ciertas zonas está superando los niveles de sostenibilidad. Estamos trabajando conjuntamente para identificar la forma en que, a través de un mejor uso e integración de las herramientas actuales, podamos asegurar tanto una gestión hídrica sostenible como una agricultura sostenible. Con vista al futuro, la Comisión Europea ha lanzado una consulta pública sobre el futuro de la Política Agrícola Común.

En 2017, la Comisión Europea propondrá la revisión de la Directiva del agua de consumo humano, como respuesta de la Comisión a la primera Iniciativa Ciudadana europea. El mantenimiento de unas elevadas normas de calidad del agua de consumo humano es una necesidad de salud pública además de un incentivo para que la UE mantenga una posición de liderazgo en el desarrollo tecnológico, la competitividad y la innovación. La Comisión Europea realizará también una propuesta para promover todavía más la captación de agua residual municipal regenerada para su utilización en agricultura y la recarga de acuíferos, mostrando que la economía circular puede ser aplicada de forma concreta en variados sectores económicos mediante soluciones win-win. Esta iniciativa encaja perfectamente con el tema el Día Mundial del Agua de 2017: agua y agua residual. La Comisión Europea reafirma su compromiso con una política hídrica ambiciosa y está dispuesta a reforzar todavía más sus impactos.”

Dicho esto, convendría que la Comisión Europea y sus instituciones colaboradoras impulsaran de forma decidida el proceso de legitimación de una propuesta innovadora como la reutilización del agua para riego agrícola y la recarga de acuíferos. Será esencial contar con la complicidad tanto de los servicios de salud pública europeos como los de gestión de los recursos hídricos nacionales y regionales, como pre-requisito para conseguir la aceptación pública de estas nuevas formas de gestión de ls recursos hídricos. Junto con la complicidad y aceptación pública, convendrá impulsar la implantación de formas de gestión ágiles, eficientes y sostenibles con las que incorporar la regeneración y la reutilización del agua en las políticas de gestión integrada de los recursos hídricos de los estados miembros. Disponemos de conocimiento y experiencia suficientes, aunque insuficientemente documentados, para ofrecer un magnífico punto de partida en esas nuevas formas de hacer.